«Tu recuerdo se desvaneció
y no tengo el valor de redactarle más…
pero a mi favor diré que
viciado estoy como loco al Candy Crush».

Un tiempo prologando
regocijado en mi interior
inmerso en un pasado
con poder de regresión .
El vicio a este dulce juego
era necesario para sumar más.
Comer el dulce caramelo a la luz de las velas,
hacer líneas de colores, luces y sombras para ganar.
Los minutos pasan
haciendo tic-tac en el reloj,
ambos, tú y yo, en este juego buscamos paz en vez de guerra
darnos vida y alegría en vez de dolor.
Obtenerlo es libre elección,
todo esto en el silencio de mi habitación,
tú me ayudas yo te ayudo, nivel tras nivel,
convirtamos esto en una sana adición,
en el juego del deseo, la locura y la pasión.
Como juego más adictivo
repitámoslo una y otra vez
enséñame tu técnica,
yo prestaré mucha atención.
Y si ves que voy por mal camino
toma mi mano y guíame por buen destino
siente aquello que en un pasado el tiempo no te supo brindar
Ven más y más conmigo, eres puro vicio.
Ahora que la culpa se esfumó,
siente aquello en su más grande esplendor
la bondad de aquel que se cree buen redactor
el que te escribe tras semanas de visitas con una única intención.
Sonreír es gratis al igual que respirar
este juego me da vida y yo soy el oxígeno que te da de respirar
en la mesa la comida de hamburguesas
y de postre juguemos una partida más.
Una Historia Fácil de Recordar quiere más sonrisas los lunes por la mañana.
Que fácil es decir que sí.
UHFDR – CCC
¡Hasta la próxima!